Difícil partido al que se enfrentaban el martes por la tarde las jugadoras entrenadas por Miriam Monfort. Su rival era el líder imbatido de la categoría, que está a bastante más nivel que las nuestras.
Aún así, se intentó comenzar el partido concentradas, buscando mejorar el partido desastroso de la ida (lo cual no era muy complicado, 11-89 a su favor).
En el primer periodo, comenzamos con fuerza centrándonos en salir de la presión visitante, mientras se mantuvieron frescas funcionaba bastante bien, aunque ninguno de los dos equipos estaba consiguiendo muchas canastas (4-2).
En el segundo, el cansancio comenzó a hacer mella y, cuando conseguíamos llegar a nuestro campo de ataque, nos costaba mucho materializar el esfuerzo en canastas, cediendo muchos robos de balón y contraataque a las rivales, aún así el parcial sólo fue de 10-6.
El tercer periodo fue desastroso en defensa, los esfuerzos por realizar las ayudas correctamente y mantener la concentración propiciaban dar muchas oportunidades en el tiro exterior a las locales, que estuvieron muy acertadas en este periodo. En ataque apenas conseguíamos realizar buenos tiros debido a la mala elección de las jugadas, propiciada por el cansancio acumulada al ser pocas efectivas. Parcial de 17-0.
En el cuarto periodo se jugó un poco mejor y se obtuvieron buenas ocasiones de canasta, pero no pudimos recortar la diferencia (6-5).
El descanso sirvió para seguir en el partido y que las ocho jugadoras descansaron, pues estaba siendo un partido muy duro. Íbamos veintitrés puntos abajo (36-13) pero habíamos conseguido superar ya el número de puntos de todo el partido de ida. Nuestro objetivo era conseguir también lo mismo en defensa, encajar menos.
La segunda parte fue desastrosa, no se conseguían canastas, siendo los peores diez minutos en ataque de toda la temporada (5º y 6º periodo, 10-2 / 14-0).
Los últimos dos periodos, al poder hacer cambios, fueron un poco mejor en cuanto a juego, pues el cansancio nos hacía menos mella, pero nada se podía hacer para recortar las diferencias.
Sabíamos que iba a ser un partido complicado ante un gran rival, pero conseguimos mejorar el partido de la ida y continuar con nuestro progreso.
Por parte del Joventut Xàbia jugaron y anotaron: Betlem, Nuria, Laura (8), Ana (2), Emilia (7), María (6), Mar e Inés.
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Partido complicado que tenían mis jugadoras por delante. La ida fue un desastre tanto de juego como de sensaciones y había que hacer algo para mejorarlo.
Jugábamos en el pabellón de Beniarbeig, algo que fue una "suerte". Si, tenían ganas de que mis niñas pisaran la pista de Pedreguer para que vieran lo bonito que es tener un pabellón como el nuestro. Además, aunque las canastas no sean muy buenas, la pista es más pequeña lo que nos venía mejor para salir de la presión.
La de Beniarbeig es enorme, aunque a algunas de mis jugadoras como Betlem les quedaba todavía algo pequeña jajajaja!.
Cuando se está tan agobiada para poder pasar el medio campo, surgen tooodos los defectos técnicos que se tiene, y es lo que les pasó. Se quedaban sin campo, cometían MUCHOS pasos, los pases eran defectuosos y nos costaban muchas canastas en contra... vamos, todo el pack. Todo lo que podían hacer mal lo hacían.
Aparte de que ser ocho jugadoras en este tipo de partidos se nos viene encima, ya que el cansancio acumulado llega a ser un factor en contra muy grande.
No me gusta meterme mucho con los árbitros, de verdad, pero es que... nos pitó el mismo chico que ha estado en muchos de mis partidos séniors, contra Benifaió, contra Alzira, contra Ibi (creo...) pero era la primera vez que lo veía pitando sólo. Yo ya sabía que este chico se suele equivocar y eso, pero es que... mira que intenté callarme, pero veía tantas cosas que me resultó imposible.
El partido lo tuvimos perdido bastante pronto y, viendo la situación, quería que mis jugadoras intentaran sacar el partido adelante bajo la presión de estar recibiendo una paliza. Quería ver como reaccionaban. De los 24 puntos que metimos, hubieron cuatro que yo recuerde perfectamente, que fueron canasta después de cometer pasos. Y me dio mucha rabia, porque así las niñas no aprenden.
A veces cuando se pierde de mucho y no hay color en el partido, el árbitro tiene más permisividad en el equipo más débil, pero es que no era ni eso, el chico seguía pitando falta al mínimo contacto, como siempre ha hecho en tooodos los partidos que le he visto pitar.
Me quejé bastante de varias acciones, pero tampoco fue para tanto. Hubo un momento - de los muuuuchos- que una de mis jugadoras volvió a cometer pasos sin ser pitados y en acción de canasta, que le grité, literalmente: "Pero hombre, no ves que son pasos!!!".
Y aquí fue donde me llevé la primera técnica de mi vida. No la primera como entrenadora, sino la primera de verdad. La verdad es que me pareció un poco exagerado pitármela, me podría haber advertido antes que me callara. Un hombre que ha pasado verdaderos infiernos en las pistas... no aguanta que le diga unas pocas cosas, además tampoco se lo estaba diciendo tan mal. Pero bueno, esa técnica me sirvió para que las niñas pudieran beber y descansar un poco. No hay mal que por bien no venga.
Ahora nos quedan dos partidos igualados, contra el Dénia '99 (+17 ganamos en la ida) y el Benidorm Negro (-5) y mis jugadoras habrán concluido su etapa infantil. Menos Emilia que es la única de primer año, pero al menos que encontremos siete compañeras más, será cadete el año que viene.
Nos queda a final de mayo los Minijocs donde en nuestro grupo ha caído Pedreguer y algunas más que no conocemos. Ya veremos que tal nos va, intentaremos revalidar o mejorar la plata de los últimos (que algunas de mis jugadoras como Laura o Emilia jugaron siendo alevines todavía).
FORÇA JOVENTUT. FORÇA INFANTIL!!!
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