Dénia BC 46-61 Rolser Pedreguer (CAMPEONAS!)

Primero que todo... Es cierto que lo importante de esta primera liga es clasificarse para autonómica y da igual en verdad si lo haces como primero, segundo o mejor tercero. Es verdad y soy consciente. 

Empezamos con nuevo equipo esta temporada con la duda de cómo iban a salir las cosas, jugamos dos amistosos en pretemporada donde nuestro juego había sido errático y desigual, no estábamos nada compenetradas. Neus se lesionó y nos quedamos sin ella toda la temporada. 

Jugamos la Lliga valenciana y ganamos todos los partidos de la liguilla y luego en semis competimos a un Cabo Mar nada acostumbrado a las horribles pistas exteriores. 

Pero esto no quería decir nada, habría que ver qué tal nuestro desempeño en la liga. El primer partido es en Jávea con todo lo que significa para mí y el segundo, el primero en nuestro nuevo pabellón, significa nuestro peor partido de la temporada y nuestra primera derrota. Bueno, nos deja chafadas y nos sirve de toque de atención para que no nos vuelva a pasar. Avanzamos sin problemas en el resto de partidos hasta que nos visita Dénia y sin hacer un gran juego el partido es muy igualado, lástima un minuto malo en el cuarto donde se ponen diez arriba, diferencia que al final se queda en siete puntos que habría que remontar y, en esos momentos, la cosa parecía chunga. Además, la que estaba siendo nuestro mejor seguro, Irene, se marcha y, aunque ya lo sabíamos todas desde el principio, no podemos evitar entristecernos y, sobre todo, echarla mucho de menos. 

Afrontamos la segunda vuelta pensando en el partido de Alzira que debíamos ganar sí o sí y así fue: nuestra primera prueba de equipo. Ganamos de seis, la superamos, con nuestro altibajos pero lo hicimos. 

A pesar de ser sólo ocho y con la ayuda de Paula cuando viene de Madrid y nuestras
voluntariosas juveniles, avanzamos en el resto de la liga sin ningún género de duda en nuestra victoria, la verdad es que siempre salíamos con la misma energía, a jugar nuestro juego, y en estos partidos que os hablo nos ha funcionado a la perfección, quizás apretando un poco sabiendo que necesitaríamos una buena diferencia de puntos si al final quedábamos terceras... La posibilidad estaba ahí. La verdad es que creo que hemos sido un equipo bastante regular, porque nuestros malos partidos han sido cosa de bajo acierto y no de problemas de actitud o de bajar los brazos... Algo que, la verdad, me gusta mucho. 

Y llegamos al día de ayer. Por la mañana me voy a Alicante con los niños con una lluvia horrible y que nos hace pasar verdadero miedo por la autopista...para llegar y no poder jugar y tener que volvernos. Lo único bueno que me dio tiempo a comer y descansar un rato, cosa que no podría haber hecho de jugarse el partido dado que a las 16 tenía que estar en Dénia para poder jugar el partido que lo decidía todo, ese que no sólo marcaba del porvenir de nuestra liga si no de todo el grupo de jugadoras amateur de la Comunidad. Oye, pero sin presión, eh?. Y a las 15:53 exactamente, cuando me disponía a salir por la puerta, algo tarde, me llama mi entrenador que no salga de Jávea que han suspendido el partido por culpa de problemas en el pabellón de Dénia.

 La verdad, teniendo en cuenta que esos problemas ya los tenían de buena mañana se habían decidido a cancelarlo algo tarde... Y como suele pasar en partidos que deciden no sólo el grupo E, si no que saldría seguro el mejor tercero, la Federación como es lógico necesitaba que se jugara en ese fin de semana, así que nos ponemos manos a la obra a ver qué podíamos hacer para conseguir un pabellón. 

Yo lo que hago es bajarme corriendo (no literalmente que caía una..) al pabellón de Jávea y preguntar por si acaso mientras veía el Jávea-Pego 2, me dicen que el partido que tenían que jugar los chicos a las 18 se había cancelado y tengo algo de esperanza de que nos dejen la pista, pero al final no puede ser -y menos mal porque después hubo problemas con el viento y se clausuró el pabellón-.

Mientras el grupo de whasap del equipo está que arde buscando soluciones y yo, por esperar en alguna parte, estoy en las gradas acabando el partido nos confirman que lo han conseguido: tenemos pista en Gata a las 18:15. A pesar de que en ese momento son las 16:47 y llegaría muy pronto, estoy tan nerviosa e ilusionada que cojo el coche y me voy para allá encontrándome en el pabellón a dos de mis compañeras que también habían ido pronto. Me pongo de corto para acostumbrarme al frío y cuando estamos todas, seis componentes del equipo sénior, dos juveniles, Julia y Alberto más unos cuantos familiares y amigos, empezamos a calentar tranquilamente pues nos quedaba algo de tiempo. Corremos, hacemos movilidad, estiramos, hacemos entradas por la derecha, pase y tiro, lo mismo por izquierda, tiros libres, tiro exterior...

 Y entonces empiezan a llegar las de Dénia que no sé por qué llegan algo tarde comparado con el rato que llevábamos nosotras ahí. Menos mal que Manolo Viciano había venido suficentemente antes y nos había traído los balones....

Bueno, por fin, empieza el partido. Estamos bastante bien al principio y conseguimos un parcial de 0-10 en cuatro minutos, luego un intercambio que les favorece a ellas con dos triples incluidos que deja el primer periodo en 10-18. Ocho puntos de diferencia que eran justo los que necesitamos para ganar la liga. Un objetivo encomiable la verdad. Yo personalmente no estaba muy acertada, todo lo que tiraba lo fallaba y llega un momento en que me pego un golpe tremendo con una jugadora rival que hace que me maree y tenga que ir por primera vez al banquillo. Luego seguí todo el partido mareada, pero no me perjudicó a la hora de jugar. Veía al Dénia un poco errático, no metido en el partido como de costumbre (tanto cambio y no jugar en su casa, tal vez) aparte de bastante protestón de cara a los árbitros y algún que otro insulto hacia nosotras. 

Ganamos el segundo periodo por 10-12 por lo que al descanso íbamos 20-30, es decir más dos para nosotras en la eliminatoria. En el descanso el ambiente es tranquilo y algo excitado, la verdad es que nos vi bastante metidas en el partido y nadie se dejaba llevar por la euforia de ir ganando, sabíamos que ante nosotras había un buen rival y que se podía dar la vuelta al partido en un minuto malo. Salimos en el tercer periodo y conseguimos otro parcial de 0-7 a nuestro favor que pone la máxima diferencia del partido en más 17. Ellas vuelven a enchufarse con seis puntos casi consecutivos de Tote hasta que tiene que abandonar el campo por una lesión de tobillo. El periodo vuelve a caer de nuestra parte por 10-16. 

El último periodo se vuelve algo marrullero, muchas jugadoras importantes cargadas de faltas y el juego de ver quién aguantaría más, los árbitros dejan algo de contacto -no ahora solo, durante todo el partido- pero mantienen el mismo criterio por todos los minutos lo cual es de agradecer pues sólo había que habituarse. Al final ganan el periodo de un punto tras dos canastas en los últimos segundos pero nada pueden hacer para quedarse con la liga que va a parar a nuestro equipo. Liga que nos asegura el acceso a la fase de ascenso, la primera para las niñas del equipo, primera para todas las jugadoras del equipo excepto para mí y Julines y es que la veteranía es un grado. 

Así es como remontamos una liga que se nos había complicado mucho con dos derrotas y en casa, así es como conseguimos quedar invictas como visitantes, algo anormal sin duda, así es como a pesar de la falta de jugadoras -porque somos pocas....- conseguimos nuestro objetivo, que aunque no estaba marcado, si nos lo habíamos marcado nosotras, creíamos en el y sabíamos que, juntas, lo conseguiríamos. 

Ahora, con ilusión, a competir al máximo en autonómica y a recuperar sensaciones contra equipos que, seguramente, serán mucho más veteranos que nosotras y de los cuales podemos aprender tantas cosas.... 

Grande chicas, grande Pedreguer!!